Cada dia que pasa
Veo el milagro de Dios en todo;
Y cada día que vivo,
Quedo desconcertado
No entendiendo el por qué,
Al caminar por un milagro,
Los que me rodean
Marchan en absoluta ceguera del milagro.
Me rodea un torbellino de prisa,
Un corre corre ansioso sin rumbo
Masas de carne y hueso,
Que se mueven de un lugar al otro
Sin destino, sin rumbo, sin vida;
Sus pasos camino a la sobrevivencia que ahoga;
¿Por qué?
En medio de todo
Percibo la sublime soberanía
Situada en todo;
Diviso la danza de cada átomo
Nutrido por el milagro que nos rodea.
¿Por qué rehúsan doblar la rodilla
Y rendir honor y reverencia?
¿Por qué insisten,
En comer del árbol prohibido,
Y quedar esclavos del dolor y el sufrimiento?
¿Qué locura es esta?
Cada día que pasa
Veo el milagro de Dios en todo,
Y mi ser desmaya.
¿Hasta cuando Dios mío?
¿Hasta cuando la locura,
De vivir en el mundo
De los ciegos a tu belleza?
Wilfredo Benítez
24 de Mayo, 2016